martes, 30 de octubre de 2012

El niño acusado de matar a su padre neonazi


BBC MUNDO 


¿Puede un niño expuesto a un violento racismo comprender la diferencia entre el bien y el mal? Ésta es una de las cuestiones que se espera aborde un juez en California en el juicio que comienza este martes contra un niño de 10 años que asesinó a su padre.
En la madrugada del 1º de mayo de 2011, el menor ahora de 12 años -que por cuestiones legales no puede ser nombrado-, entró a la sala de su hogar en la ciudad de Riverside, al sur de California, y le disparó a su padre, un rabioso neonazi de 32 años, quien dormía en el sillón.

En caso de ser encontrado culpable, el pequeño podría estar detenido hasta los 23 años.
Desde entonces, el niño se encuentra en un centro de detención juvenil a la espera de un juicio que se desarrollará sin jurado, algo usual en casos de menores, por lo que quedará en manos del juez decidir si está en condiciones mentales de ser acusado de asesinato.
Se trata de un caso inusual porque este tipo de violencia de parte de niños no es común: según un recuento citado por el diario estadounidense The New York Times, entre 1976 y 2007 se realizaron 16 arrestos de menores de 11 años por la muerte de uno de sus padres.
Y los juicios son aún más extraños.
El código penal californiano establece que los menores de 14 años no pueden ser acusados de un crimen sin una evidencia clara de que "conocían su ilegalidad".