martes, 30 de octubre de 2012

Sacerdotes y pastores hacen campaña para sacar latinos a votar


Las homilías del sacerdote Scott Santarosa en las misas domingueras han dejado a un lado las reflexiones teológicas genéricas para ponerse a tono con el clima de campaña proselitista que vive Estados Unidos por estos días.
"Jesús fue una figura política, cuando rompió las reglas y se enfrentó a los ancianos se volvió político. Así que nosotros somos personas políticas a su semejanza, llamadas a involucrarnos", señala el jesuita, a cargo de la iglesia Dolores Mission del Este de Los Ángeles.Crucifijo

Esta iglesia, en un barrio hispano de California, es parte de una red nacional que trabaja para que los votantes habilitados salgan, el 6 de noviembre, a elegir al próximo presidente estadounidense, entre el demócrata Barack Obama y su contrincante republicano, Mitt Romney.
Al momento de los avisos parroquiales, los voluntarios de su comunidad se turnan para subir al ambón y reforzar la idea con datos prácticos: cómo votar, dónde registrarse, cómo entender la boleta.
Líderes de distintas religiones están usando sus iglesias para llevar "las almas a las urnas", según proclaman: no sólo para interpelar desde la prédica, sino para repartir tarjetas de registro de votantes durante la liturgia, organizar caravanas comunitarias o explicar las distintas propuestas estatales que también se decidirán ese día.
Y los esfuerzos de han concentrado en los electores de minorías, tanto afroamericanos como hispanos. Estos últimos no sólo tienen bajos índices históricos de participación, sino que además se han visto afectados por nuevas normas electorales -como la exigencia de credencial con foto o la limitación del sufragio anticipado en algunos estados- que, a juicio de los analistas, podría desalentarlos de tomar parte en el proceso.